Lleva ahí desde el principio de los tiempos, o al menos, desde que el ser humano tiene conciencia como raza. De hecho, su fulgor nocturno siempre nos ha fascinado, y aunque ahora entendemos mucho mejor la razón por la que tenemos ese satélite orbitando alrededor de nuestro planeta, los misterios lunares nos siguen fascinando por completo. Inspiradora de hermosas canciones, poesías y hasta novelas, la Luna y su belleza han emocionado a muchos artistas, y su influencia sigue siendo estudiada no solo en las mareas, sino también en la propia psicología y en la personalidad de muchas personas, como se recoge en las leyendas sobre hombres lobo que aparecen con la luna llena.

El hombre la pisó hace ya cinco décadas, convirtiéndola en el primer lugar no terrestre en ser “conquistado” por el ser humano, toda una hazaña que parece que volverá a repetirse dentro de poco. Sin embargo, a pesar de todos los estudios que se siguen realizando sobre nuestro único satélite, la Luna sigue guardando secretos que muchos desean desvelar. Algunos de los más importantes tienen que ver con esa zona sombría que nunca vemos, el lado oscuro de la Luna, una parte que se mantiene fuera de nuestro alcance y que guarda, al parecer, secretos increíbles. Mucho se ha especulado sobre este misterio, pero nosotros queremos separar la leyenda de la realidad para ofrecer informaciones veraces. Esto es todo lo que sabemos sobre la cara oculta de la Luna.

La música es una de esas artes especiales que hacen que nos emocionemos y que comprendamos mucho mejor lo que sentimos simplemente por compartirlo con los demás. A todos nos gusta la música, algún estilo en concreto, algún intérprete o banda en especial, y solemos disfrutar de ella a todas horas, en el coche, cuando viajamos, en casa, en las discotecas y pubs, incluso en los conciertos, donde podemos vivirla en directo y enamorarnos todavía más de su contenido. Pero la música también tiene una función terapéutica.

De hecho, la música ha sido considerada siempre como catártica, es decir, provocadora de emociones y sentimientos, incluso a veces de los que tenemos reprimidos. Algo ocurre en nuestro cerebro cuando escuchamos una canción que nos gusta, e incluso hay ciertas melodías y ritmos que nos ayudan a relajarnos, a descansar, a rebajar la tensión que podamos tener en nuestro interior. De ahí parte la musicoterapia, un tipo de terapia psicológica que ayuda a las personas a través de la música.